Generalmente, el agravio de ocasionar intencionalmente angustia emocional comprende ciertas formas de conducta que son tan terribles que pueden causar trauma emocional severo en la víctima. En este caso, la víctima puede recuperar los daños de la persona que causó la angustia emocional.

No todas las conductas ofensivas pueden calificar como inflicción intencional de angustia emocional, sino que la gente en la sociedad debería de lidiar con algún grado de conducta ofensiva. Cuando la conducta llega al grado de ser reprensible, no obstante, la recuperación por el trauma emocional resultante está disponible.

Elementos de Inflicción Intencional

Las reglas en particular para la infliccion intencional varían de un estado a otro estado; a continuación algunos elementos que deben estar presentes cuando se reclame para recuperación:

• Conducta extrema u ofensiva que
• Causar intencionalmente o descuidadamente
• Angustia emocional seria, y daño corporal potencial

Cuando la situación cumple con todos los elementos mencionados arriba, la persona que actuó de una manera extrema y ofensiva es responsable tanto por la angustia emocional intensa y el daño corporal que resulta de las circunstancias estresantes tales como aborto por ejemplo.

Adicionalmente, las partes preocupadas podrían recuperarse por angustia emocional bajo situaciones en donde actos intensos y ofensivos no están dirigidos hacia ellos. Básicamente, este tipo de reclamo implica conducta intensa ofensiva al miembro de la familia del reclamante en la presencia del reclamante. Este reclamo difiere entre los estados en comparación al agravio básico de infliccion intencional, no obstante, los siguientes son algunos elementos generales de la lesión:

• Conducta intensa y ofensiva
• Dirigida a la tercer persona que
• Con propósito y descuido causa
• Angustia emocional seria
• A un miembro de la familia inmediata de la tercera persona, ya sea que suceda daño corporal, o
• A cualquier persona presente si el daño corporal sucede

Conducta Extrema y Ofensiva

Uno de los asuntos más significativos en la infliccion intencional de angustia emocional es determinar que precisamente comprende los actos extremos y ofensivos. Sin el acto extremo y ofensivo, la parte lesionada no puede tramitar un reclamo por infliccion intencional aunque el acusado se comportara con malicia y/o intención peligrosa.

La conducta extrema y ofensiva no se traduce sólo como un acto malicioso, perjudicial u ofensivo. La gente debería tener algún grado de capacidad de sobrellevar la rudeza ordinaria y ser ofensivo. Para alcanzar 1° extremo de ser ofensivo y excesivo, el actor debe ir más allá de lo que es una decencia ordinaria. Los insultos o la rudeza ordinaria no califican como un acto extremo y excesivo, aunque pueden ir más allá de la naturaleza única de la relación entre las partes.

Los insultos o actos ordinarios pueden comprender comportamiento extremo y ofensivo cuando el acusado está consciente de que la víctima se inclina a la angustia emocional debido a alguna condición física o mental o anormalidad. Por ejemplo, si Julie sabe que Jane es extremadamente claustrofóbica y a propósito la encierra en un closet para asustarla, ella puede tramitar reclamos para recuperar por la infliccion intencional de angustia emocional.

La aplicación de un derecho legal no puede equivaler a la infliccion intencional de angustia emocional, aunque el comportamiento cause trauma extremo a la persona. Si el casero empezó un procedimiento de desalojo en contra de una persona enferma y empobrecida que fue incapaz de pagar la renta por un año, el acto del casero no comprenderá infliccion intencional de angustia emocional aunque la persona enferma esté pasando por una condición estresante. Aquí el casero está aplicando sus derechos legales y su acto es un acto privilegiado.

Finalmente, el jurado toma la decisión final si el acto o conducta en cuestión llega hasta el grado de ser extremo y excesivo.

 Intención/Imprudencia

Aparte de ser un acto extremo y excesivo, el acusado también debe actuar con intención o descuido. Por tanto el acusado debe a propósito causar la angustia emocional extrema o está consciente de que esta angustia emocional extrema sucederá. El acusado podría ser responsable por la infliccion intencional cuando se comporte con indiferencia a propósito para con la alta probabilidad de que suceda angustia emocional extrema.

Como un ejemplo, cuando alguien recibe y lee un mensaje de texto de su otro significativo mientras está en la casa de un amigo, se enoja y rompe el jarrón que contiene las cenizas del padre del amigo, el amigo puede tramitar y ganar el caso de infliccion intencional bajo la teoría de indiferencia descuidada.

Angustia Emocional Severa Debido al Acto de Infliccion Intencional

La angustia emocional se refiere a muchas emociones negativas tales como dolor, vergüenza, arrepentimiento, y miedo. Para cumplir con los elementos de un reclamo por infliccion intencional, la angustia emocional debe ser de grado “severo” en respuesta al acto extremo y excesivo. El significado preciso de angustia emocional severa es poco claro y los demandantes deben probar al jurado que la angustia emocional que están sufriendo alcanza el grado severo para justificar el otorgamiento por infliccion intencional.

Existen ciertos tips para determinar si el disturbio emocional comprende angustia emocional severa. Cuando el acto extremo y ofensivo causa sufrimiento que ninguna persona racional puede soportar, el jurado tenderá a sostener que la experiencia alcanza el grado de angustia emocional severa.

El grado y sus la duración de la angustia emocional puede aumentar su severidad, lo que significa que mientras más largo sea el disturbio emocional, es más probable que contribuya a un grado mayor de angustia emocional. El demandante, por tanto, debe proporcionar evidencia para probar su angustia emocional al jurado. Ejemplo, el demandante puede usar la paranoia y ansiedad continúa como resultado de de la broma de Halloween que terminó mal para demostrar que están sufriendo de angustia emocional extrema como consecuencia de la conducta.

Hay ocasiones en que la naturaleza de la conducta en cuestión será suficiente para mostrar que la víctima experimenta angustia emocional severa. Cuando el comportamiento es distintivamente perturbador, el demandante no tiene que presentar más evidencias para respaldar su reclamo, puesto que el comportamiento por sí tiene culpa de que la angustia emocional sea “casi asumida”.

El daño corporal también sirve como un medidor de que se ha experimentado angustia emocional severa. Dolores de cabeza o úlceras, por ejemplo, pueden demostrar que el demandante sufrió angustia emocional severa que se muestra mediante síntomas físicos.